Discurso de San Lucas 2015

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Ilustrísimo Señor Vicerrector de Profesorado, Excelentísimo Señor Presidente de la Real Academia de Medicina y Cirugía de Valladolid, Ilustrísima Señora Directora General de Universidades e Investigación (de la Consejería de Educación), Ilustrísimo Señor Director General de Investigación, Innovación e Infraestructuras (de la Consejería de Sanidad), Ilustrísimo Señor Decano, estimados profesores y compañeros,

Quisiera empezar por darles las gracias, en nombre de todos los miembros de la Academia de Alumnos Internos de la Facultad de Medicina de esta Universidad, por la concesión de este espacio cada año en la festividad de nuestro patrón, para presentarles un retazo de la vida de nuestra academia.

Señor Vicerrector, ilustres miembros de la mesa, les agradezco su presencia en este día importante para la nuestra Facultad y, de modo especial, para los Alumnos Internos que hoy toman posesión de su plaza.

Señor Decano, en nombre de nuestra institución, agradecerle un año más la deferencia de hacernos partícipes de esta celebración, que con tanto cariño recordamos los que la hemos vivido.

Las siguientes palabras de este discurso no pueden dejar de ser un reconocimiento a los hoy homenajeados, y por ello, me dirijo a los profesores Caro-Patón, Carvajal, Jimeno, Represa, Coca y Miranda, que alcanzan la jubilación tras haber dedicado su vida a tratar de inculcarnos sus conocimientos, de despejarnos el camino en el arduo conocimiento de la salud y la enfermedad, a tratar de lograr ante todo que los hoy estudiantes de medicina mañana lleguen a ser médicos buenos, en su sentido más profesional y humano. Porque en palabras de Carl Jung “Uno recuerda con aprecio a sus maestros brillantes, pero con gratitud a aquellos que tocaron nuestros sentimientos”. Por ello, gracias por todo el esfuerzo y trabajo que han invertido en ayudarnos a labrar nuestro futuro, en mostrarnos el estudio como `una oportunidad para penetrar en el bello y maravilloso mundo del saber’.

Tras una larga labor docente y asistencial, quisiéramos desearles de forma sincera que este nuevo capítulo que ahora comienza en sus vidas, esté lleno de júbilo, y hacerles llegar desde la Academia de Alumnos Internos, nuestra más sincera enhorabuena.

Asimismo, quisiera felicitar a los profesores y al personal de administración y servicios que en este día celebra los 25 años de servicios a la Facultad.

Debo continuar mi discurso con más palabras de agradecimiento, y es que los miembros de la Academia somos realmente afortunados por poder contar con la ayuda y apoyo de la comunidad docente de la Facultad, y por ello, de una forma especial, quiero transmitir mi gratitud a todos los profesionales del Servicio de Urgencias del Hospital Universitario Rio Hortega y del Hospital Clínico Universitario de Valladolid, que con tanto cariño y paciencia se esfuerzan a diario en enseñarnos que, como expresó William Osler, “el buen médico trata la enfermedad, el gran médico trata al paciente que tiene la enfermedad”; por eso, queremos agradecerles su compromiso desinteresado y generoso con los alumnos internos, sus ganas de dejarnos aprender a su lado que la Medicina es algo más sólo conocimientos, y transmitirnos los valores humanos sin los que no se puede entender esta profesión.

Tampoco quisiera olvidarme de mostrar mi sincera admiración a los investigadores de los diferentes Departamentos y Laboratorios de la Facultad, pues sin duda con su ardua labor nos enseñan que aunque en ocasiones el reconocimiento tarde en llegar y el camino por recorrer sea intrincado, no debemos abandonar aquellos proyectos en los que merece la pena creer, y con su trabajo nos muestran valores como el esfuerzo y la constancia, que Pasteur expresó con unas palabras que todos ellos podrían hoy suscribir: “en el campo de la investigación el azar no favorece más que a los espíritus preparados”.

Finalmente, me gustaría agradecer a todas aquellas personas que de tantas forma distintas participan y de forma tan entusiasta nos ayudan a desempeñar las funciones de la Academia; y aunque son ahora muchos los nombres que recorren mi mente, no quiero alargarme en exceso y no puedo nombrarlos a todos, así que a todos ellos que son y no están: muchas gracias. 

 

Han transcurrido ya 119 años desde que se fundara nuestra estimada Academia, y a pesar de la transformación que ha ido experimentando a lo largo de todo este tiempo, y que muchos de los presentes podrán corroborar como antiguos miembros de la Academia, estas variaciones no han logrado alterar la esencia ni la vocación por las que un día nació, pues ya Darwin afirmó que “no es más fuerte ni el más inteligente el que sobrevive, sino el que más se adapta a los cambios”. Es aquí donde radica uno de los más importantes desafíos a los que se ha enfrentado la Academia durante su ya prolífica existencia: se han ido modificado los planes de estudio, el funcionamiento de los hospitales, el papel y labor encomendada a los estudiantes de medicina… pero, ante todo, ha persistido el compromiso altruista con una formación más integral y humana, la búsqueda de acercamiento al paciente… Pues ¿no se espera siempre del médico que sea buen profesional, pero que también sepa escuchar y comprender? Porque en momentos donde los avances técnicos, la informatización o las publicaciones cobran mayor relevancia, no debemos olvidar la advertencia de Gregorio Marañón al decir “El mejor instrumento de exploración con el que cuenta el médico es la silla”, y así, tratar de mejorar cada día, buscar la excelencia en la clínica, pero sin relegar la importancia de la empatía y la confianza.

Quizá sea esa firme convicción en los valores de una Medicina más humana la que consigue que hoy la Academia de Alumnos Internos goce de una excelente salud, e incluso sirva de inspiración para alumnos internos de otras Facultades. El año pasado ya anunciamos la fundación de la Academia de Alumnos Internos de Granada, con la que en el mes de marzo organizamos el I Congreso de Estudiantes de Investigación BioSanitaria. Este fue un éxito en su intención de acercar a los estudiantes el mundo de los congresos científicos, en el que sin duda deberemos participar durante el ejercicio de nuestra profesión; por lo que ya estamos trabajando en los preparativos de una segunda edición. Pero además, hace apenas unos meses se fundó la Academia de Alumnos Internos de Salamanca, con la que también planteamos la posibilidad de vincular ambas academias por los valores y compromiso que compartimos.

Asimismo, por nuestra parte, continuamos con un ambicioso proyecto formativo del que nos sentimos realmente orgullosos, desarrollado gracias a una Junta Directiva infatigable y a un Presidente, mi predecesor en el cargo, Guillermo Torroba Balmori, que nos transmitió su ilusión y entusiasmo por Academia activa, pero también más cercana. Por ello, durante este año pasado se llevaron a cabo los siguientes cursos:

- Curso de Entrevista Motivacional

- Curso de Electrocardiografía clínica

- Curso de Comunicación de malas noticias

- Curso de Atención al paciente politraumatizado

- Taller básico de Metodología de la Investigación

- Taller de Ecografía en Urgencias y Emergencias

 

Desde aquí, queremos agradecer a todos aquellos que, con su esfuerzo y su tiempo, han colaborado por mejorar nuestra formación a través de la Academia en la búsqueda incansable de un conocimiento sólido hoy, que mañana se reflejará en una buena práctica médica; y comprometernos a tratar de seguir avanzando y mejorando por este camino. En esta responsabilidad asumimos como propias las palabras de William Osler “el que estudia Medicina sin libros navega un mar desconocido, pero el que estudia la medicina sin pacientes no va a la mar en absoluto”.

 

En lo referente a nuestra revista, “Clínica”, me complace anunciar que durante este curso se ha completado la redacción y edición del número 24, que se encuentra actualmente en fase de impresión, y en muy breve tiempo estará acabada y a su disposión. 

Para ir terminando, me gustaría dirigirme a nuestros compañeros, nuevos Alumnos Internos: bienvenidos a nuestra Academia, enhorabuena por superar la dura oposición, por haber logrado vuestro objetivo. Pero la aventura, el verdadero desafío, comienza ahora, cuando llega el momento de demostrar la actitud: deberéis lograr el modo de compaginar vuestros estudios y el trabajo en el hospital o el departamento, pero tal vez un día entendáis que ambos se complementan y os aportan una visión global de la labor del médico. Pero, ante todo, disfrutad de esta oportunidad, quizá un día la atesoréis como uno de los más bonitos recuerdos de vuestro paso por la universidad: comenzad a vivir la Medicina, aprended de cada error, superad las dificultades que irán surgiendo, dejad que los pacientes, profesionales y vuestros compañeros os guíen y acompañen en este camino que hoy empezáis. No os desaniméis si el trabajo y el sacrificio no encuentran una recompensa inmediata, continuad avanzando, persiguiendo el sueño que hoy os trajo hasta aquí y luchad por no rendiros al desánimo y la apatía, que nunca perdáis la ilusión y la emoción con que empezáis esta nueva etapa, porque “la capacidad de entusiasmo es signo de salud espiritual” (… de Marañón).

Para concluir, me dispongo ahora a llamar a los Señores Alumnos Internos Numerarios a los que el Señor Decano, y el resto de honorables miembros de la mesa, les harán entrega del Diploma que les acredita como miembros de pleno derecho de la Academia de Alumnos Internos.

 

Alumnos Internos del Área Clínica

Milena Antúnez Ballesteros

Ramón Arroyo Ruiz

Silvia Virginia Campesino Nieto

Daniel Casquete Sánchez

Luis Antonio Cuéllar Martín

Marta Fernández Blanco

María de la Fuente Grijalvo

Daniel Gallo Valentín

Antonio de las Heras Vallelado

Sheila Hernández García

Elisa Alba Ingelmo Astorga

Claudio López Mesa

Adrián Margarida de Castro

Estefanía Olmedo Martín

Daniel Ortega Vallelado

Noelia Puime Figueroa

Julia Ruiz Vázquez

Lucía Sánchez Casado

Laura Sánchez Delgado

Belén Sánchez Quirós

Pablo Vaquero Cepeda

Paula Velayos García

 

Alumnos Internos del Área de Investigación

María Álvarez Gil

David Amo Arranz

Raquel Gómez de León Zapata

Claudia Gómez López de San Román

Carlos Eduardo Hernández Huertas

Ana Lamoca Abad

Laura Pérez Arnaiz

Sergio Rodríguez Conde

Miguel Ángel Rojo Pérez

Sergio Sagrado Querol

Santiago Sanz Medrano

Pablo Simón Rodríguez

Andrea Vicente Pardo

Alberto Vicente Prieto